Conducir un vehículo en Estados Unidos por primera vez puede ser tan tenso como tedioso: hay que armarse de paciencia y saber que con la ayuda de herramientas tecnológicas se maneja más relajado. El dominio del idioma inglés ayuda, pero también es cierto que las indicaciones de los carteles en las rutas pueden confundir. Algunos tips: hay autovías que requieren el pago de peaje (turnpike), pero la mayoría son gratuitas; las velocidades no están expresadas en kilómetros, sino en millas; las faltas y penalidades responden a las reglamentaciones del estado en el que se encuentre circulando; se puede doblar en U en una transitada avenida cuando corresponda el turno o girar en un semáforo en rojo a la derecha si no hay una indicación que lo prohíba; el “STOP” realmente significa parar (no sólo disminuir la velocidad, aunque no tengamos a la vista personas ni vehículos); si dos autos llegan al mismo tiempo a la intersección, el conductor que está a la izquierda cede el paso al conductor de la derecha. Una de las situaciones más confusas para el inexperto se da cuando, en plena carretera de múltiples vías, aparece en el carril derecho una fila de bastones amarillos marcando un sendero exclusivo de vía rápida. Sepa que son para vehículos con dos o más pasajeros.
Esta introducción, valga la aclaración, no es para disuadir a los turistas y que no alquilen autos sino para que sean precavidos y que conduzcan con la lucidez de la juventud, pero con el aplomo de un septuagenario. Como dijimos, en la actualidad, el manejo por Estados Unidos es más ameno y simplificado. Complicado era años atrás cuando los Sistemas de Posicionamiento Global (GPS) no eran de uso popular. En lugar de una pantalla con la imagen del autito y la cartografía dibujada a cuatro colores, sólo existían aparatosos dispositivos con display gris verdoso sin orientación por voz, que marcaban sólo coordenadas. Hoy, hay que admitir que es un placer manejar con este asistente. Cada vez los diseñan con visores táctiles retroiluminados más chatos y con más definición, audio de indicaciones de giro en varios idiomas y más livianos. Algunos programas incorporaron a los GPS que se usan en Argentina relatos a cargo de famosos, alertas por proximidad de reductores de velocidad, pasos a nivel, zonas de riesgo y hasta aviso de ubicación de radares.
Si no cuenta con uno, lo puede alquilar al momento de tomar un auto.
Otra de las incorporaciones que ha cambiado el semblante de los conductores que alquilan un auto en Estados Unidos es la opción de contratar el servicio que en el país se conoce como telepeaje y los norteamericanos denominan carriles exclusivos (“SunPass”/ “E-PASS”/ “LeeWay”/ “TollPass”). Estas vías rápidas, la mayoría sin barrera, están provistas de cámaras con obturación veloz que registran la placa del vehículo. Si es alquilado, envían un listado de reporte a las rentadoras para que cotejen con su parque automotor si la unidad fue tomada con peaje pre-pago. Si no compraron este opcional, labran una infracción. Atención: si no adquirió este servicio e involuntariamente se mantuvo en el carril de peaje automático, no se detenga ni retroceda; puede ser fatal. La multa es de US$ 100 (www.sunpass.com/violationsMissedToll).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario